El encuentro gastronómico se desarrolló en la ciudad de Buenos Aires y se presentaron 320 pequeños, medianos y grandes productores de todo el país. Se expusieron alrededor de 7.000 productoros y hubo talleres especiales de cocina.
Todos los olores del territorio argentino se conjugaron en Matienzo y Zapiola, en el barrio porteño de Colegiales. Ahí, se pudo transitar por los distintos stands y se visibilizaron los platos más populares y los más extravagantes. Como por ejemplo, los alimentos y biocosméticos realizados a base de lavanda de una empresa productora de Villa Llanquin, un pueblo ubicado a 40 kilómetros de Bariloche. O la yerba mate producida por el colegio Don Bosco, de Uribelarrea, un pueblo de Buenos Aires que también se destaca por sus fiambres. El alfajor de dulce y queso fue la gran atracción del patio.
«El MAPPA es un evento muy lindo, donde uno puede compartir cosas gastronómicas y productos de diferentes provincias y que son muy difíciles de conseguir para el consumidor. Además, uno puedo conseguir varias cosas a un precio módico», indicó a Télam la cocinera Maru Botana, en relación al evento multitudinario.
Además de la feria, también hubo un patio gastronómico federal con cartas especiales de chefs reconocidos, propuestas culturales, charlas y talleres dictados por Dolli Irigoyen, Lele Cristóbal, Christian Petersen, Pamela Villar, Julio Báez, Fran Seubert y Micaela Najmanovich.