El Museo Nacional de Bellas Artes y Amigos del Bellas Artes presentaron el ciclo de cine “La belleza de terror”. Este especial de películas comenzó ayer por la tarde y continuará hoy a las 19. El resto de las fechas tendrán lugar el viernes 28 y sábado 29 de abril, y será con entrada gratuita.
El cronograma ofrece cuatro clásicos del género como “Nosferatu: Una sinfonía del horror”, “Fenómenos”, “El carnaval de las almas” y “La noche de los muertos vivos”. Estos filmes tienen en común que están catalogados como obras maestras del terror.
«Nosferatu: Una sinfonía del horror”, dirigida por Friedrich Wilhelm Murnau, fue la primera película en proyectarse.
Leonardo D’Espósito, el programador del ciclo, declaró que “existe un prejuicio con el cine de terror, basado en la mirada de filmes que se apoyan exclusivamente en el efecto fisiológico del espectador, en la andanada de sustos”.
Y agregó: “Es uno de los géneros más pensantes y metafísicos: apunta a los miedos primordiales del ser humano convirtiéndolos en monstruos y apariciones. La sala oscura del cine, por lo demás, nos llena de inquietud, condición necesaria para el miedo. De allí que gran parte de las obras maestras del cine sean películas de terror y de horror. Cabe la precisión: “terror” es miedo de mirar y “horror” no solo es un superlativo de lo anterior, sino también el rechazo por lo que se ha visto, el efecto posterior tras haber sucumbido a la visión de lo monstruoso”.
«La noche de los muertos vivos”, de George A. Romero, será el último filme en proyectarse.
Ayer se llevó a cabo la primera función del ciclo, con “Nosferatu: Una sinfonía del horror”, de Friedrich Wilhelm Murnau. Hoy, desde las 19, se proyectará “Fenómenos”, de Tod Browning. Por su parte, el viernes 28 y el sábado 29 de abril se podrán ver “El carnaval de las almas”, de Herk Harvey, y “La noche de los muertos vivos”, de George A. Romero, respectivamente.
Las funciones serán en la sala de Amigos del Bellas Artes, que está ubicada en Av. Figueroa Alcorta 2280. La sala tiene capacidad para 235 personas y generalmente se utiliza para proyectar películas que no se distribuyen comercialmente. En 2014, el lugar fue renovado, por lo que posee nuevas butacas y un mejor sonido. Por otro lado, las entradas son gratuitas y se pueden adquirir a través de la página web del Museo de Bellas Artes.
