Alumni de Roque Pérez y San Miguel Las Heras jugaron los cuartos de final de Menores de la Liga de Lobos, uno de los campeonatos más característicos del interior de Buenos Aires. San Miguel se impuso 2 a 1 y en el momento del pitazo final, Martín Pietro se apartó del grupo de festejo y emocionó a todos con su gesto.
Martín Pietro ganó, pero decidió ir a acompañar a su rival, que rememoró un mal momento. Fotos: La Huella.
El partido de Sexta tuvo de todo, como ocurre en cada instancia decisiva. Pero luego de los 90 minutos, todo quedó en la cancha. Pietro observó que uno de los rivales, Joaquín Dortona, delantero de Alumni, estalló en un llanto, y la desazón tuvo poco que ver con la eliminación: su padre había fallecido hace algunos días.
El jugador de San Miguel lo siguió y en medio de abrazos, lo acompañó hasta el vestuario. Es más, el herense abandonó la comitiva que seguía de jolgorio en una de las áreas para brindarle consuelo a uno de los rivales.
Los chicos dan el ejemplo. El último abrazo, al lado del árbitro.
Por el hecho, toda la hinchada local aplaudió a los rivales y los simpatizantes de Alumni, uno de los equipos legendarios de la zona, se pusieron de pie para despedir a los chicos de San Miguel en el estadio Saúl D’Arino.
“Esto es lo que realmente vale. Desde afuera tenemos que aplaudir estos gestos, muchos chicos de los que están acá mañana pueden ser grandes futbolistas, o no, pero lo que importa es la actitud y los valores que hay que inculcarles desde pequeños”, contó uno de los dirigentes de la institución de Roque Pérez.
Después del gesto, se siguió desarrollando la fecha de Infantiles de la liga lobense.
