La vida es un baile alegre. Así creció “Male” Schefer y ya de grande, transmitió el lema en la facultad de Derecho. Ahí, bailaba y practicaba coreografías junto a sus compañeras en la Universidad Católica Argentina. Ya de grande, decidió abrir su propia academia. Eso sí, asisten mujeres dentro del rango de 38 y 80 años.
“Crecí con una mama que bailaba, cantaba y sigue haciéndolo a los 75 años”, contó la mujer. Su mamá, directamente, fue la artífice para el gran proyecto. Obviamente, con el correr de los años Malena se empezó a dedicar en serio y empezó a dar clases con una amiga.
Ver esta publicación en Instagram
Con las clases, pudo costear sus viajes a Estados Unidos para continuar con sus estudios. En principio, el local estuvo abierto al público en general, pero después, se empezó a delimitar la edad. ¿Por qué? “La edad fue aumentando, como yo, por eso fui determinando la edad para crear un espacio de mujeres en la misma sintonía”, dijo la protagonista.
Las bailarinas de «On Stage», después de una práctica.
Y así, le dio vida al local “On Stage” con señoras que son madres, esposas, trabajadoras y amigas. “Nunca es tarde para bailar, hay grupos de mujeres de 60 a 80 años que este año fue difícil bajarlas del escenario. Subirse es exponerse también y nos enseña muchas cosas, muchos estaban emocionados hasta las lágrimas al ver a sus madres o abuelas disfrutar así”, expresó Schefer, que mantiene la agenda completa en San Isidro y Recoleta.
Plantel completo. El cierre de fin de año fue con todas las luces.
Además, «Male» organiza viajes grupales a Nueva York y Londres. Y como broche de oro, las chicas de la tercera edad presentaron un gran baile en el teatro. Con 74 años, Magdalena resumió: “Transmitimos nuestra alegría y les demostramos a nuestros nietos de que la vejez es muy linda. Nosotras también tenemos algo para mostrar, nos encanta subir al escenario y que nos aplaudan”.
