La expectativa era total. Para colmo, la confirmación de la presencia de Lionel Messi aumentó el deseo de poder estar en La Bombonera para despedir al “último 10 del fútbol argentino”, como cuentan los sanjuaninos en cada nota. Para alegría de su hijo, Oscar pudo costear el pasaje y las entradas, por eso serán parte de los 54.000 xeneizes que despedirán a Juan Román Riquelme.
“Se gastó la vida para ir, habrá que comer fideos por tres semanas”, cuenta el hincha de Boca entre risas. Claro, es que no es fácil trasladarse hasta Buenos Aires, en total, para el chico se gastaron $ 90.000 ya que no es socio del club. “Es una locura lo del dinero, pero es un recuerdo que mi hijo no se va a olvidar más en toda su vida”.
Si bien los dos han viajado varias veces para alentar a Boca y Román, querían estar sí o sí en esta velada histórica. El fanatismo por los colores estuvo desde siempre, la casa no tiene un rincón donde no haya algo azul y amarillo. De hecho, el pequeño se llama Nicolás Martín en honor a Burdisso y a Palermo.
«Román es un ídolo indiscutido. Nos ha dado muchas alegrías. Yo tengo 50 años y lo he visto jugar en 30. Viajé fuera de Argentina para verlo jugar. Es otro Dios como Maradona. Ambos comparten la misma mitad del corazón del hincha de Boca. Yo sufrí mucho cuando falleció el Diego, no sé qué me pasaría cuando ya no esté él», contó emocionado el sanjuanino.
Los fanáticos ya están en viaje hacia Capital, con todos los bombos y las banderas. No estarán solos, ya que Oscar es presidente de la Agrupación Azul y Oro y juntos a ellos también irán algunos hinchas característicos de la provincia.