La Asociación Civil “Re-Crearme para ayudar” se formalizó en 2019 de la mano de Verónica Carabajal. Pero en realidad, la idea se empezó a gestar de la mano de su madre, muchos años atrás, y ahora sus hijas comparten las distintas actividades. Así, tres generaciones de mujeres continúan dando una mano a los niños más necesitados en Villa Soldati. Pero eso no es todo, también recorren el barrio y realizan visitas guiadas con los chicos y las madres.
“Mamé el trabajo y ahora siguen mis hijas. Nosotras somos de San Cristóbal, mis chicas son scouts y siempre estuvieron comprometidas con la ayuda hacia el prójimo. Así arrancamos con las actividades itinerantes. Hicimos base en Fátima, en Villa Soldati, pero nuestro trabajo también pasa por el Bajo Flores, barrio Rivadavia, Zavaleta y muchos rincones más”, le dijo Carabajal, de 52 años, a ADN+.
La voz principal de la organización, dio detalles del trabajo de “Re-Crearme”: “Nuestro fuerte son las actividades del fin de semana, ya que la mayoría de los comedores están inactivos esos días. Tratamos de que las porciones sean suculentas para que los chicos puedan comida a sus casas”.
Carabajal también explicó sobre la iniciativa de los paseos: “Este año implementamos la movida de salir del barrio. Ya fuimos al Obelisco, al Teatro Colón, al cine, a las playas de Costanera Norte y acampamos en una quinta en Ingeniero Maschwitz. Cada vez que salimos, los pibes se ponen como locos y eso nos llena de satisfacción”. En esa misma línea, también se realizaron talleres y reuniones con las madres, quienes empezaron a participar de los paseos y también dijeron presente en actos de la Legislatura.
“Acá es todo a pulmón, nos mantenemos con rifas y recibimos donaciones de ropa. Trabajamos con un grupo de mujeres que están en Misiones y que arman artículos con los retazos que les mandamos”, explicó Verónica, quien añadió: “Todo lo que se envía como donación, se comercializa allá y se retribuye a nuestro espacio, es una cadena”.
Ante la superpoblación del barrio, el local comenzó a presentar fallas: “El espacio físico, que es un garaje, empezó a ceder en la parte del techo, entonces por seguridad decidimos reunirnos en la puerta, desde ahí planificamos todo el itinerario. Mientras tanto seguimos con el trabajo en mi casa, en este tipo de acciones, no existe el descanso”, resumió la representante de “Re-Crearme”, el espacio solidario que ayuda desde su sede y que también patea la calle para dar una mano.