En las últimas horas, un equipo arqueológico llevó a cabo un magnífico descubrimiento. El mismo se produjo en el municipio de Fitjar, en la costa suroeste de Noruega. Está relacionado con tesoros en tumbas vikingas de 1.200 años de antigüedad.
Mediante las excavaciones correspondientes en dos tumbas que datan de entre los años 800 y 850, durante el inicio de la Era Vikinga, los exploradores se encontraron con joyas, monedas y herramientas textiles. Fuerte entusiasmo en torno a este hecho.
Este hallazgo tiene que ver con el elevado estatus social de las mujeres enterradas en las tumbas, al mismo tiempo que revela posibles vínculos con regiones lejanas del continente europeo como Inglaterra, Irlanda y Dinamarca.
Entre los elementos descubiertos se destacan fragmentos de broches ovalados dorados, una parte de un caldero metálico y un cierre de libro que probablemente provino de una Biblia en un monasterio cristiano extranjero, según indicó el arqueólogo Søren Diinhoff, del Museo Universitario de Bergen.
«Creemos que el cierre pudo haberse arrancado de un libro en Inglaterra o Irlanda antes de ser transformado en un broche para una mujer», exteriorizó al respecto el propio Diinhoff en declaraciones recogidas por el «Smithsonian Magazine».
Por otra parte, los arqueólogos también hallaron monedas de plata, entre las que se destacó un ejemplar realmente extraño de Hedeby, acuñada en el sur de Dinamarca en el siglo IX. También un collar con 46 cuentas de vidrio.
En cuanto a las herramientas de producción textil, se encontraron un huso, una espada de tejido y tijeras de lana. Esto refuerza la hipótesis de que una de las mujeres enterradas cumplía un rol vital en la confección de textiles en la granja.
«La producción textil era una tarea de gran importancia. Las granjas que confeccionaban ropa fina ocupaban una posición elevada en la comunidad», señaló el mencionado Diinhoff sobre este asunto.