Luego de hacer historia el último fin de semana alcanzando las 400 victorias oficiales como entrenador de una sola institución española, Diego Simeone volvió a escribir una página dorada en el libro del Atlético de Madrid. Con una actuación soberbia de Antoine Griezmann, el Colchonero goleó al Getafe por 3-0 y se aseguró un lugar en la próxima edición de la Champions League.
Se podía prever que el Atleti iba a clasificar al torneo continental europeo, pues solo le faltaba conseguir un punto para que el Athletic Bilbao no lo iguale en la tabla. Sin embargo, logró el objetivo demostrando un gran nivel individual y colectivo, lo que lo vuelve a posicionar como uno de los equipos a temer en los torneos venideros.
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El primer gol del partido llegó a los 27 minutos del primer tiempo gracias a un extraordinario pase de Rodrigo De Paul desde la mitad del campo de juego hasta el área rival para habilitar al delantero francés, quien con mucha calidad definió frente al arquero David Soria.
Por su parte, el segundo tanto tuvo lugar a los 42 y nuevamente sucedió por la jerarquía que tienen los futbolistas campeones del mundo con la Selección Argentina. Con mucha precisión, el ex mediocampista de Racing pinchó la pelota para que Ángel Correa corra dentro del área y toque de primera hacia el centro para que aparezca Griezmann con un remate imposible de atajar.
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El tercero no tuvo participación nacional, pero sí contó con la sutileza del ex jugador del Barcelona, quien tiró una diagonal y colocó el balón entre las piernas del portero para sentenciar la historia en el derbi español.
Con este resultado, el Atlético de Madrid no solo consiguió la clasificación al campeonato más importante del viejo continente, sino que también se convirtió en uno de los pocos clubes en alcanzar un logro similar por duodécimo año consecutivo, algo que solo parece posible con el «Cholo» Simeone como entrenador, líder y referente.