Hablar de Rodrigo es hablar de fiesta. Su música sigue presente en cada celebración. Hoy se cumplen 25 años de su muerte, que se dio por un accidente automovilístico. Desde ese entonces, su popularidad creció a pasos agigantados y su legado continúa vigente.
En la puerta del 2000, el artista irrumpió con todo en Buenos Aires, con su cuarteto característico. Recorrió todo el país, los principales teatros y llenó 13 estadios Luna Park.
Rodrigo marcó un hito, llenó 13 estadios Luna Park.
Logró algo inédito, que todos cantaran “Soy cordobés” y llevó su género a lo más alto. Tuvo una amistad conocida con Diego Maradona, a quien le dedicó una canción.
Tras su fallecimiento, si figura ocupó todas las planas del país y del mundo. Walter Olmos, uno de sus laderos, saltó a la fama de inmediato y su banda continuó con el repertorio.
La empresa discográfica, “Magenta”, reeditó su álbum “A 2000” y registró picos en ventas. Belgrano, el club de sus amores, adoptó una imagen de Rodrigo en su camiseta y en cuanto a la música, su hermano, Ulises, se convirtió en una de las principales figuras del estilo que sigue más vigente que nunca.
Amante de los tres “Charlys”
En una nota, Rodrigo se autodefinió como fanático de los tres “Charlys”: “Carlos ‘La Mona’ Jiménez, ‘Charly’ García y Carlos Gardel”. Curiosamiente, comparte la misma fecha en el calendario del aniversario de su fallecimiento con el ícono del tanto.
