Lutri se integrará a la Red de Corresponsales de Aguas Subterráneas para dar visibilidad a las problemáticas locales. Básicamente, investigará sobre la existencia y el impacto en aguas superficiales y subterráneas de herbicidas (glifosato y atrazina), usados en los cultivos de soja y maíz.
La investigadora propuso tres cuestiones en base a su experiencia: «La importancia de los estudios hidrogeológicos en aguas subterráneas naturalmente de buena calidad (agua dulce y joven) para el consumo humano que están siendo afectadas por actividades agrícolas y ganaderas intensivas; las dificultades para investigar en países como Argentina donde la moneda se devalúa y los insumos para investigar están muchas veces en dólares, y los desafíos que se presentan al ser mujer en un campo científico dominado por varones».
La doctora en Ciencias Geológicas y profesora en la Universidad Nacional de Río Cuarto es especialista en el estudio de las aguas subterráneas, centrándose en la hidrodinámica, la hidrogeoquímica y los isótopos del agua. «En mi investigación durante el doctorado estudié los procesos que controlan la distribución espacio-temporal de las características geoquímicas de aguas superficiales y subterráneas, las posibles anomalías respecto al fondo natural y la vinculación entre las características hidrogeológicas y la presencia de herbicidas (glifosato y atrazina)», agregó.
Respecto a sus investigaciones en particular, Lutri y su equipo encontraron glifosato y AMPA (su metabolito producto de degradación) en aguas subterráneas en el 15,8 % de las muestras que tomaron, en un rango de concentraciones de 1,3-2,0 μg/L (PMG) y 3,1 -15,8 μg/L (AMPA); en tanto que en aguas superficiales fueron detectados en el 66% de las muestras en un rango de 0,2 a 167,0 μg/ L y 0,7 a 49,4 μg/ L respectivamente.
Según su experiencia, indicó que hay que prestar mucha atención sobre los efectos nocivos del glifosato, además del impacto negativo en la biodiversidad.
Y concluyó: «Se necesita la interacción y el compromiso de agrónomos, médicos, geólogos, sociólogos, economistas, biólogos, químicos, entre otros, incluyendo además a los productores y pobladores, a sabiendas de que todos somos consumidores de estos productos, de forma directa o indirecta. Buscar el compromiso y la empatía social, supongo que eso es la base de todo».