Este domingo, en el mítico Estadio Olímpico de Berlín, los seleccionados de España e Inglaterra se encontraron frente a frente bajo la órbita de la gran final de la Eurocopa 2024 que se está llevando a cabo en el territorio de Alemania.
En ese contexto y, tal como se imaginaba en la previa, la emoción se apoderó de la escena por completo. Y también la tensión, la cual reinó desde el pitazo inicial. Por ello es que el primer tiempo del compromiso no se caracterizó por la belleza.
Así las cosas, el descanso llegó con un rotundo empate sin anotaciones en el marcador. Como consecuencia de ello, de cara a la etapa complementaria, el trámite quedó abierto por completo y con la chance de que pase cualquier cosa.
En medio de ese panorama, ni bien se inició el segundo tiempo, España encontró la apertura del marcador. Luego de una muy interesante maniobra colectiva, Nico Williams definió cruzado y estableció el 1-0 para el conjunto ibérico.
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Esto, lógicamente, generó que los dirigidos por Gareth Southgate se vieran obligados a adelantar líneas para buscar el equilibrio en el marcador. Pero, paralelamente, le otorgaron más espacios a España para aumentar distancias en el resultado.
Y, a los 28 minutos del período final, llegó el empate del seleccionado británico. Cole Palmer culminó una muy buena jugada de Inglaterra y le pegó de media distancia para poner la pelota contra un palo y decretar el festejado 1-1.
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Pero, sobre el cierre del juego, más precisamente a los 41 minutos del segundo tiempo, Mikel Oyarzábal, al borde de la posición adelantada, empujó la pelota para poner el 2-1 que resultaría definitivo y que coronaría a España por cuarta vez en la Eurocopa.
