Luego de su paso por la NBA y una breve estadía en Serbia, Facundo Campazzo volvió a disputar un partido en el Real Madrid. Como volviendo a sus viejas épocas, el argentino demostró su jerarquía y fue una pieza importante en la victoria de su equipo ante Unicaja Málaga por 88-81 en la final de la Supercopa de España.
En un estadio Palacio de los Deportes de Murcia colmado con 7.400 espectadores, el base se hizo cargo del partido y brilló con 19 puntos, cuatro asistencias y tres rebotes, convirtiéndose en el jugador con más anotaciones del encuentro.
«Considero que soy mejor jugador que cuando me fui y ahora hay que mostrarlo en el día a día. Voy a trabajar duro e intentaré conseguir los objetivos«, había manifestado el ex basquetbolista de Denver Nuggets en julio luego de confirmar su regreso a la institución merengue. Y sí, ayer no solo fue el jugador más determinante del duelo, sino que también logró posicionarse como el MVP de la final por tercera vez en su carrera.
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Campazzo, leyenda del Real Madrid
Cuando el argentino regresó a su casa, desde el club lo presentaron como un jugador «que ha vivido una de las épocas más exitosas» de la historia de la institución. En cinco temporadas, el base demostró ser uno de los mejores deportistas de Europa y del básquet FIBA.
No solo alcanzó un nivel abismal, con el que logró ser elegido dos veces en el quinteto ideal del campeonato o ganar el MVP de las final en 2018-2019, sino que fue clave para que el club madrileño consiga once títulos, entre los que se destacaron tres Ligas, dos Copas de Europa y dos Copas del Rey.
Con la victoria de ayer, Campazzo sumó su duodécimo campeonato en el Madrid y mostró un nivel que recordó a sus mejores épocas. Con un paso frustrado en Denver Nuggets y Dallas Mavericks, Facu volvió al lugar donde fue feliz para conquistar nuevamente el viejo continente y obtener un gran rendimiento con el objetivo de seguir creciendo y ayudar en la renovación que atravesará el seleccionado argentino en el futuro.