El Mercadito de las Artes es un espacio cultural ubicado en Ramos Mejía que tiene como objetivo asegurarle un buen momento de música y gastronomía a todas las personas que se acercan. El proyecto está liderado por Gustavo Firmenich, un saxofonista argentino que decidió ir en busca de uno de sus sueños.
Según reveló en una entrevista con el diario Clarín, lo más dificultoso fue poner en condiciones el lugar, ya que estaba abandonado y lleno de escombros. En palabras del propio artista, el Mercado Bolívar, como se lo conocía originalmente, nació en marzo de 1954 y dejó de funcionar en la década del 90 por el increíble crecimiento que tuvieron los shoppings.
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Para recuperarlo y ponerlo a tono, Gustavo trabajó junto a su esposa Patricia y su socia Romina Bochicchio, con quien formó la ONG «Club de Música«, creada para «democratizar el acceso al arte».
En la nota, comentó que el negocio «no tiene un fin económico», sino que lo principal es «que sea un lugar de encuentro«. En la misma línea, añadió: «Quiero que tenga ese concepto, sentarte a tomar un café y algo va a pasar, algo vas a ver, a escuchar«.
Al ver el trabajo que se estaba llevando a cabo, los propios vecinos empezaron a acercarse para preguntar cuándo inaugurarían. Ante la consulta de una vecina, Firmenich le respondió: «El 6 de marzo estemos como estemos nos vamos a juntar a brindar y a festejar».
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Luego de ocuparse del asunto durante semanas, pudo abrir el espacio cultural para volver a darle vida a Bolívar 547. Al estilo de la vieja escuela, el mercado cuenta con un buffet, un auditorio para 60 personas y tres locales pensados para que las personas interesadas tomen clases de teatro, pintura y yoga, entre otras actividades.
Tras conseguir el objetivo, se realizó una fiesta para agradecerle a todos que aportaron su granito de arena: «No deja de ser un espacio para compartir. A mí me parece que en lo cultural mientras más nos agrupamos, más nos potenciamos«, finalizó Gustavo.
