Sin dudas, el Túnel Fehmarnbelt se convertirá en una de las maravillas de la ingeniería. Conectará a las ciudades de Hamburgo y Copenhague (Alemania y Dinamarca) y tendrá una extensión de 18 kilómetros sobre el Mar Báltico. La obra marcará un hito y reactivará el comercio y la vida sociocultural entre ambas naciones.
Con el nuevo cruce, el paso entre ciudades, que era de cinco horas, se podrá realizar en dos horas y media. En tanto, el cruce en ferry, que demora 45 minutos, se podrá hacer en apenas 10 minutos.
La gran obra se construye utilizando una técnica de túneles sumergidos, lo que lo convierte en el túnel de este tipo más largo del mundo. Cada una de las 79 secciones principales que conformarán la estructura mide 213 metros de largo.

El túnel tendrá calzadas propias de autopistas, sobre las profundidades del mar.
Las secciones serán transportadas al mar y colocadas en una zanja dragada en el lecho marino, a una profundidad de 12 metros.
Cuando esté terminado, el túnel no solo será el túnel sumergido más largo del mundo, sino que también ostentará otros cuatro récords: será el túnel combinado de carretera y ferrocarril más largo del mundo, el túnel submarino para carreteras más largo, el túnel sumergido más profundo con tráfico de carretera y ferrocarril, y el segundo túnel sumergido de hormigón más profundo.
Este avance mejorará la movilidad y también impulsará el comercio y el turismo entre ambas naciones. nuevo estándar para futuros proyectos de infraestructura submarina. Su finalización marcará un hito en la historia de la construcción y abrirá nuevas posibilidades para la integración económica y cultural en toda la región.
Nuestro túnel subfluvial
En Argentina existe el complejo Uranga-Begnis, un túnel que cruza el Río Paraná y conecta la capital de Santa Fe con Paraná, Entre Ríos. Fue inaugurado en 1969 y tiene una longitud de más de dos kilómetros y medio.

El túnel subfluvial conecta a las capitales de Santa Fe y Entre Ríos, cruzando el Río Paraná.