El primer bajo utilizado por Paul McCartney en The Beatles se volvió un ícono. El instrumento, con su particular cuerpo de violín, es uno de los sellos de los primeros discos de la marca británica y es por eso que Hoffner, su fabricante, lanzó una campaña para intentar encontrar el original.
La fábrica alemana inició la búsqueda a nivel mundial a partir de la campaña The Lost Bass Project, en la que solicitan cualquier tipo de información relevante al respecto. El bajo es considerado como uno de los objetos más emblemáticos de la empresa.
La fábrica alemana de instrumentos musicales Höfner inició la búsqueda mundial del bajo original que Paul McCartney ejecutó en The Beatles y que es considerado uno de los objetos más emblemáticos de la empresa. Paul usó ese instrumento desde el Top Ten Club de Hamburgo hasta 1963 cuando se concretaron las primeras grabaciones en los estudios londinenses de Abbey Road por lo que se escucha en emblemáticas canciones como «Love Me Do» y «She Loves You».
No está claro qué pasó con el bajo original, aunque se presume que fue robado. Según trascendió, McCartney lo habría guardado después de grabar el álbum “Let it Be”, en 1969, el último disco de estudio de la banda pero luego fue extraviado.
Desde la compañía alemana indicaron que “aunque nadie sabe realmente qué pasó con el bajo, es muy probable que haya sido robado. Hasta el día de hoy sigue siendo un misterio”.