En las últimas horas se llevó a cabo la presentación de una Inteligencia Artificial realmente avanzada que tomó por sorpresa a propios y extraños. Este avance que también toca a la robótica tiene el potencial de transformar la interacción entre robots y el mundo físico.
Se trata de «InterMimic», un sistema de Inteligencia Artificial que cuenta con la capacidad de imitar movimientos humanos con una precisión sencillamente inédita. Así puede superar las limitaciones de la captura de movimiento y mejorar la integración con las leyes de la física.
No es un detalle menor que este sistema combina aprendizaje automático, simulaciones físicas y enseñanza por distilación de políticas para abordar la interacción humano-objeto. Sin lugar a dudas, un avance completamente espectacular.
Hasta ahora, esta problemática había sido difícil de resolver como consecuencia de los errores en los datos de captura de movimiento (MoCap), contactos imprecisos y también la falta de detalle en las interacciones manuales.
La Inteligencia Artificial continúa con su avance.
En ese sentido, «InterMimic» utiliza un aprendizaje progresivo que se inicia con políticas entrenadas en pequeños conjuntos de datos específicos. Las mismas corrigen los errores de los movimientos capturados antes de ser usados en simulaciones más complejas.
Posteriormente, estas simulaciones se ven combinadas en una política estudiante que aprende de múltiples ejemplos refinados, generando simulaciones más realistas. Sí, todo un proceso complejo y elaborado con resultados óptimos.
En definitiva, el sistema utiliza aprendizaje por refuerzo para optimizar los movimientos generados, garantizando que cumplan con las leyes de la física y superando la limitación. A su vez, puede predecir futuras interacciones basándose en movimientos anteriores.
