Este domingo, el Seven de Dubái desarrolló la fase eliminatoria. Desde las cinco de la mañana, los Pumas afrontaron los cuartos de final, clasificaron a semifinal y disputaron la gran final ante Sudáfrica por primera vez en su historia, donde alcanzaron el subcampeonato.
Luego de debutar en la jornada de ayer con victorias ante España por 26-12, Australia por 31-14 e Irlanda por 17-7, el seleccionado argentino tuvo esta mañana una agenda cargada con actividad.
En la madrugada argentina, el equipo que dirige Santiago Gómez Cora derrotó a Samoa en la ronda eliminatoria por 21-14. De esta manera, llegaron a los 40 triunfos ante el conjunto africano y sellaron su clasificación a semifinales.
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Unas horas después, la Argentina consiguió un resultado más que histórico, ya que los jugadores dejaron en el camino a una potencia mundial como Nueva Zelanda por 21-19. Para entender el significado de la victoria solo es necesario ver el historial entre ambos países, que marca que los All Blacks ganaron 86 encuentros y solo perdieron 14.
Pasado el mediodía, los Pumas jugaron la gran final ante los Springboks, pero esta vez el partido fue adverso y el marcador no reflejó lo esperado. Aunque en la previa estaba la ilusión, Sudáfrica sabe jugar el Seven de Dubái como nadie en el circuito, pues salió campeón en ocho de los últimos diez torneos. Sin embargo, el combinado nacional, que fue campeón panamericano en Santiago hace algunas semanas y consiguió la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Tokio en 2021, supo representar al país de la mejor manera y logró un segundo lugar histórico.
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Formación argentina
Santiago Mare, Luciano González, Germán Schultz, Marcos Moneta, Joaquín Pellandini, Matías Osadczuk y Santiago Alvarez. Ingresaron Tobías Wade, Gastón Revol y Agustín Fraga.
