El 12 de marzo pasado, durante una marcha de jubilados, el fotoperiodista Pablo Grillo recibió el impacto en la frente de una lata de gas lacrimógeno lanzada por un efectivo de Gendarmería Nacional.
Grillo se encontraba intentando tomar una fotografía en Plaza Congreso y el impacto lo dejó al borde de la muerte. Sin embargo, afortunadamente y luego de tres meses de internación, recibió el alta médica.
En medio de ese panorama, el momento estuvo caracterizado por una fuerte emoción: afuera lo esperaron sus padres y sus amigos, quienes se unieron en un aplauso para premiar su lucha y su recuperación.
No es un detalle menor que, a partir de ahora, Grillo continuará con su recuperación en el Hospital de Rehabilitación Manuel Rocca. Sin ningún tipo de dudas, un alivio considerable para quien no dejó de pelear.
"Pablo Grillo":
Porque recibió el alta médica pic.twitter.com/KbhQXal7w3— ¿Por qué es tendencia? (@porquetendencia) June 3, 2025
«¡Gracias eternas por el cariño, el apoyo y el acompañamiento!», exteriorizaron desde el entorno del fotoperiodista, mostrándose muy movilizados por la cantidad de gente que no le soltó la mano ni por un momento.
Cabe recordar que Grillo había recibido el diagnóstico de hidrocefalia luego de controlar las fístulas por las que perdía líquido cefalorraquídeo. Esto obligó a una nueva intervención quirúrgica en el Hospital Ramos Mejía.
Grillo permaneció en terapia intensiva desde el 12 de marzo y llegó a protagonizar una complicación neurológica como consecuencia directa del traumatismo sufrido. Sin embargo, el panorama ya es mucho más alentador.