A lo largo y a lo ancho del globo terráqueo, cada vez son más las personas que apuestan por la alimentación saludable. Lo hacen con el objetivo de sentirse mejor, tener menos problemas de salud y contar con una vida más prolongada. En medio de ese panorama, las vitaminas juegan un papel preponderante.
Sin ir más lejos, la vitamina D es un nutriente clave para el organismo ya que cuenta, entre sus beneficios, con una colaboración muy importante en la regulación de muchos procesos metabólicos. De todos modos, incorporarla no es nada sencillo ya que solamente se puede encontrar en algunos alimentos específicos.
La vitamina D se comporta como una hormona con múltiples funciones en el organismo. Bajo esa órbita, de todas sus acciones, la mejor estudiada y la más importante se relaciona directamente y sin escalas con la salud ósea. Por ende, es completamente determinante consumirla para fortalecer este aspecto.
Según indican los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos, la vitamina D es un nutriente necesario para la salud ya que ayuda al cuerpo a absorber el calcio, una de las principales sustancias necesarias para tener huesos fuertes. De esta virtud clave se desprenden resultados realmente favorables
Es que, junto con el calcio, la vitamina D contribuye a prevenir la osteoporosis, una enfermedad que hace que los huesos se vuelvan más delgado y débiles y que sean más propensas a fracturas. Además, al cuerpo le hace falta esta vitamina para otras funciones relacionadas con los músculos y los nervios.
Los alimentos con más vitamina D
1- Pescado graso
2- Ricota
3- Yemas de huevo
4- Hongos
5- Leche
6- Cereales fortificados
7- Palta
