A partir de los 50 años el cuerpo empieza a pasar factura. Si bien en la actualidad superar esa edad no tiene el mismo significado y efecto que décadas anteriores, hay que saber cuidarse para seguir estando óptimos y saludables. Se empieza a perder masa muscular y la grasa toma más lugar en el físico, por eso hay que consumir diferentes vitaminas y nutrientes que disminuyen el riesgo a enfermarse y ayudan en la salud.
Vitamina B12 para adquirir energía
Esta vitamina ayuda al cuerpo para que aproveche la energía de las proteínas y las grasas de los alimentos. Además, produce glóbulos rojos que transportan oxígeno a las células y los músculos en funcionamiento.
Si bien la ingesta de vitamina B12 no cambia luego de los 50 años, la edad altera la forma en que el cuerpo la procesa. Por eso es recomendable que con el paso del tiempo se intente obtener la mayor parte de la vitamina de los multivitamínicos y los alimentos fortificados, ya que utilizan una forma sintética que no requiere ácido del estómago para su absorción.
Calcio para fortalecer los huesos
Para favorecer la salud ósea, se recomienda ingerir mil miligramos de calcio al día. Esto equivale a tres porciones de alimentos lácteos. Si no se llega a consumir esta cantidad, se sugiere tomar un multivitamínico para alcanzar la ingesta diaria sugerida.
La vitamina D, fundamental para absorber el calcio.
La vitamina D ayuda a absorber el calcio
La vitamina D ayuda a la absorción del calcio por parte del cuerpo y supervisa el movimiento del calcio dentro y fuera de los huesos. También participa de manera similar en la salud del músculo esquelético.
El cuerpo produce vitamina D cuando la piel se expone a la luz solar del verano. Sin embargo, muchas personas evitan el sol debido a preocupaciones sobre el cáncer de piel y las arrugas prematuras de la piel. Para esto, es necesario ingerir algunos alimentos que poseen vitamina D: el salmón, el atún, el queso y los huevos fortificados.
La vitamina B6 ayuda en el metabolismo de grasas, carbohidratos y proteínas
Para mantener el corazón en funcionamiento y activo, facilitando la liberación de glucosa del hígado y los músculos, es necesario consumir vitamina B6.
Después de los 50 años, aumentan las necesidades de vitamina B6. Es necesario consumir salmón, cereales para el desayuno fortificados, papas, bananas y carne de cerdo.
Fibra para la digestión
La fibra ayuda a mantener tu sistema digestivo funcionando sin problemas y reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares y obesidad. Además, proporciona sensación de saciedad, lo que ayuda a controlar el peso.
Para cumplir con la ingesta de fibra sugerida, hay que incluir al menos cinco porciones de frutas y verduras y tres porciones de cereales integrales en la alimentación. Estos alimentos también proporcionan muchos otros nutrientes, como los carbohidratos para obtener energía, vitaminas, minerales y fitonutrientes, compuestos protectores de las plantas.
Más allá de la dieta, a todos los nutrientes y la alimentación hay que acompañarlos de una vida activa. Es clave realizar actividad física para ayudar la salud. Además, hacer deporte contribuye también a la salud mental.
