Hace exactamente una semana, en el Cilindro de Avellaneda, Racing Club cosechó una enorme victoria por 2-0 contra Botafogo. En ese entonces, Luciano Vietto y Adrián Martínez se encargaron de las conquistas de la Academia.
De esa manera, los comandados estratégicamente por Gustavo Costas dieron un paso realmente considerable en torno a su objetivo de coronarse como los nuevos campeones de la Recopa Sudamericana y así cosechar un nuevo título internacional.
Pero todavía faltaba el partido de vuelta, el decisivo. Y, el mismo, con el Estadio Olímpico Nilton Santos de la ciudad de Río de Janeiro como testigo y como escenario, brasileños y argentinos volvieron a encontrarse frente a frente.
En medio de ese panorama, Racing se plantó de muy buena manera en un territorio hostil. De hecho, durante los primeros 45 minutos, la Academia dominó el encuentro y dispuso de las mejores oportunidades para abrir la cuenta.
De todas maneras, ninguno de los dos equipos expuso efectividad en los últimos metros. Como consecuencia de ello, el descanso desembarcó con una paridad sin anotaciones en el marcador y un panorama alentador para la visita.
Posteriormente, ni bien comenzó la etapa complementaria, Racing se puso en ventaja. Sucedió a los 5 minutos de dicho período final, gracias a un extraordinario remate de Matías Zaracho, ingresado desde el banco de suplentes.
¡¡¡ENTRÓ PARA ESTO!!! ¡¡¡GOLAZO DE ZARACHO PARA EL 1-0 (3-0 GLOBAL) DE RACING CONTRA BOTAFOGO!!!
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Posteriormente, a los 24 minutos del segundo tiempo, Bruno Zuculini apareció por sorpresa dentro del área de Botafogo y resolvió como si fuese un delantero de toda la vida para ampliar diferencias en favor de la Academia.
¡¡¡LE ROMPIÓ EL ARCO!!! ¡¡¡GOLAZO DE ZUCULINI PARA EL 2-0 (4-0 GLOBAL) DE RACING A BOTAFOGO!!!
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Finalmente, ese resultado se mantuvo hasta el pitazo final y Racing redondeó una victoria global de nada más ni nada menos que 4-0 para demostrar una enorme contundencia y poder gritar campeón en la Recopa Sudamericana.