Momento de graficar una hermosa historia de vida que tiene como protagonistas principales a cuatro futbolistas del ascenso argentino. Sí, una historia de esas que no solamente emocionan, sino que también inspiran a propios y extraños.
Sucede que Ignacio Rados, jugador de General Lamadrid, halló en el fútbol y también en el trabajo una manera de poder continuar luego de sufrir el fallecimiento de su padre en el marco de un trágico e inesperado accidente.
Así fue como comenzó a darle forma a un importante emprendimiento que también incluyó a sus colegas Lucas Cuevas (General Lamadrid), Antonio Valentín Paulides (Deportivo Laferrere) y Gonzalo Yordan (Sportivo Italiano).
Se trató de la apertura de un taller de estética vehicular en el barrio porteño de Mataderos. Sí, una manera de poder seguir transitando el camino de la vida al mismo tiempo que se continúa adelante con el sueño futbolístico.
«A los 19 años perdí a mi papá en un accidente: una moto de agua lo pasó por arriba. Estaba con mi mamá y unos amigos en San Miguel del Monte. Ahora estamos esperando a ver cómo se resuelve todo de la parte de la justicia», comenzó señalando Rados en diálogo con TN.
«Mi mamá estuvo una semana en terapia intensiva. Quedó muy mal y el tema judicial está inconcluso. En su momento ella decidió no hacer público el caso ni llevarlo a los medios para preservar a mi familia», profundizó.
«Mi papá era mecánico, yo no sabía nada de ese trabajo y después de su muerte me tocó ocuparme del taller. Tomé un poco el rol de hacerme cargo de la casa y de mi familia en un momento en que estábamos mal», concluyó.
