Tiene 63 años, recorre el país en moto y empuja a otras mujeres a que hagan lo mismo

Alicia Burnowicz es jubilada y hace cuatro años comenzó con la aventura de viajar por toda Argentina con su moto.

Por Lucas Torretta

Abr 29, 2023

Alicia Burnowicz nació en Tigre, Buenos Aires, y desde hace décadas que está radicada en Bariloche. En el año 2008, en una de sus caminatas de montaña con el grupo del Club Andino, empezó a tener problemas en las rodillas, por lo que tuvo que abandonar una de sus actividades favoritas y empezó a experimentar en otros deportes.

Rápidamente, se compró su primera moto, una Honda Bross 125. Con este vehículo, Alicia estuvo durante diez años manejando los fines de semana en lugares cercanos a su casa, como Circuito Chico, Colonia Suiza y Llao Llao, entre otros.

Con 63 años, Alicia recorre las rutas argentinas con su moto.

En 2019, con 60 años recién cumplidos, se jubiló. Luego de dejar su fábrica de artesanías, la mujer decidió realizar un viaje hasta El Bolsón y recorrer los 120 kilómetros que tenía de distancia. En una entrevista con VíaPaís, la motoquera manifestó que fue muy emotivo, ya que viajó sola y pudo disfrutar de estar en la ruta y sacar fotos.

Esta pasión por los vehículos no le nació de un día para otro, sino que lo tiene con ella desde niña. En la nota, Alicia recordó su infancia y contó que su padre la crio como “si fuese un varón”. Y agregó: “Yo prefería ayudarlo a limpiar el carburador del Fiat 600 antes que jugar con las muñecas. Me parecía mucho más divertido”.

En todos estos años recorriendo las rutas argentinas, ya acumuló más de 65.000 kilómetros manejando su motocicleta. Dentro de los destinos que visitó están Puerto Madryn, El Calafate y Santiago del Estero. La mayoría de sus viajes los realiza sola o acompañada de algunos amigos. Aunque le gustaría manejar en compañía de otras mujeres, todavía no lo hizo porque no encuentra con quién.

En cuatro años, ya recorrió más de 65.000 kilómetros.

Siempre que frena en alguna estación de servicio, nota que las mujeres más jóvenes la miran con caras intrigadas e inspiradas. Cuando alguna se anima a hablarle, ella las alienta para que cumplan sus sueños.

 La edad no importa, podemos ser libres, felices y seguir cumpliendo sueños después de los 60 años. Según los mensajes que recibo, soy una inspiración y eso más de una vez me emociona muchísimo, finalizó.

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