Este 10 de junio se celebra el Día de la Seguridad Vial, una fecha que busca llamar a la reflexión y concientizar a todos los conductores acerca de la responsabilidad de estar detrás de un volante.
En este sentido usar neumáticos que garantizan una buena adhesión al suelo en heladas o nevadas, así como aumentar la distancia de seguridad entre vehículos, revisar líquidos y usar técnicas de frenado adecuadas son otras de las claves para conducir en invierno.
¿Cómo el invierno puede afectar el vehículo y la conducción?
Durante el invierno, las principales causas de siniestros viales son los desvíos o los choques, potenciados por factores climáticos adversos, como el hielo, la lluvia, la nieve o la niebla que pueden reducir la adherencia del neumático al suelo.
Por lo tanto, para evitar accidentes, es fundamental tener presente los siguientes puntos:
Elegir el neumático adecuado. Son el único elemento que está en contacto directo con el suelo y, en estos casos, es ideal contar con un neumático que brinde el agarre necesario para estas condiciones. En algunas localidades, es obligatorio el uso de clavos o cadenas.
Conservar una presión correcta. Cuando la temperatura baja a 10°C o menos, los neumáticos comienzan a perder, lentamente, la presión de aire. Por eso, es fundamental chequearlo para mejorar la tracción, el agarre en cualquier superficie y ayudar a la reducción de emisiones de CO2. Es importante revisar el manual del vehículo para conocer la cifra adecuada.
La conducción también se verá afectada. Se recomienda aumentar la distancia con el vehículo delantero a 4 o 5 segundos, que equivalen a 150 metros de distancia.
Considerar algunas precauciones sobre el mantenimiento del vehículo. Es necesario revisar el líquido anticongelante para evitar un congelamiento en el radiador.
Revisar el líquido de limpieza para el parabrisas. Aquí se recomienda que un producto que sea pueda eliminar el hielo y/o la nieve que esté tapando la visión del conductor.
Antes de salir a la ruta, tanto en estas como en otras condiciones, siempre es aconsejable hacer una evaluación general del vehículo para evitar cualquier tipo de siniestro.
