El mar siempre devuelve evidencias. En la semana, en Colombia, arqueólogos ubicaron a un barco hundido, el galeón San José, hundido en 1708. Dentro de la embarcación español, encontraron porcelanas chinas, cañones y monedas coloniales acuñadas en Lima, Perú.
Se llegó a la conclusión de que los utensillos corresponden a la dinastía Kangxi y las inscripciones de las armas datan del 1665. También hallaron joyas y perlas.
Aunque la ubicación exacta del barco permanece clasificada, los estudios recientes (incluyendo inspecciones realizadas con vehículos submarinos no tripulados y técnicas de fotogrametría) permitieron reconstruir digitalmente el sitio y examinar su contenido sin necesidad de intervención directa.

Piezas arqueológicas y oro en el fondo del mar, parte de la carga que descubrieron los investigadores en el San José.
Las monedas, de ocho escudos, eran las de mayor valor emitidas por la Casa de Moneda de Lima durante el periodo virreinal. El diseño presenta una cruz de Jerusalén en el anverso, flanqueada por castillos y leones, mientras que el reverso muestra los pilares de Hércules sobre olas
Cabe recordar que el San José transportaba una carga valuada hoy entre 17.000 y 20.000 millones de dólares, compuesta por oro, plata y piedras preciosas extraídas del virreinato del Perú. Su hundimiento se produjo tras un enfrentamiento con la flota británica cerca de Cartagena, cuando se dirigía a Europa durante la Guerra de Sucesión Española.

La embarcación, de bandera española, fue hundida cerca de las costas de Cartagena, en Colombia.
La historia de la embarcación, más allá del oro y las joyas, constituye un testimonio clave del comercio marítimo colonial y la expansión del Imperio español. Su hallazgo reaviva el interés por los tesoros sumergidos y por el patrimonio histórico de Latinoamérica.