El retrato de dos niños sumergiéndose en el agua fue galardonado por la plataforma Street Art Cities. El lugar elegido para el artista fue la torre típica de 35 metros de la ciudad balnearia, que justamente es considerada la ciudad de los chicos.
“Retraté la esencia de la felicidad a través de la imagen de dos niños, Nina y Salvi, deleitándose en un refrescante chapuzón”, contó el muralista, que fue declarado personalidad destacada de la cultura por la Legislatura porteña y es autor de más de 300 obras callejeras. Pintó en varias estaciones de las líneas A, D y H del subte porteño y es considerado uno de los diez mejores muralistas del mundo.
El padre de la criatura. Ron, con su obra detrás.
El mural de ron fue seleccionado entre más de 300 pinturas en el marco de la VI Bienal de Arte de Miramar y gracias a su diseño, permite una visualización en 360 grados que se puede apreciar desde varios puntos de la ciudad.
El mural se puede apreciar desde varios puntos.
La publicación especializada destacó a la obra por su “originalidad, técnica y poderosa narrativa visual”. La temática de los niños se repite en Martín, quien hace dos meses inauguró Olivia en la ciudad, un mural impactante en Palermo que muestra a una niña con ojos curiosos, observando la ciudad.
Los detalles técnicos fueron valorados por los especialistas.
El artista le puso su sello a varias estaciones de subte de Buenos Aires.
