En las últimas horas se conocieron detalles sobre una inesperada y llamativa iniciativa diseñada por una ciudad de Estados Unidos que se ubica en medio de la mítica Ruta 66. Y se traduce en una opción tentadora para los interesados.
Se trata de Tulsa, ciudad ubicada en el estado de Oklahoma. La misma diagramó el «Tulsa Remote», un programa diseñado para atraer trabajadores remotos ofreciendo una suma de dinero realmente interesante para las personas.
Hablamos, nada más ni nada menos, que de 10.000 dólares para que los trabajadores se muden allí por un año. Esta iniciativa se inició en 2018 como parte de un esfuerzo para incrementar la actividad económica de la propia ciudad.
Paralelamente, la misión de este programa es aprovechar el auge del trabajo remoto y revitalizar esta ciudad que actualmente cuenta con poco más de 400.000 habitantes, algo insuficiente para las aspiraciones de sus autoridades.
Esta iniciativa fue encabezada por la fundación George Kaiser Family Foundation con el objetivo de atraer a los mencionados trabajadores remotos y poder fomentar, de esta manera, el desarrollo económico y también social de Tulsa.
En su primera etapa, este proyecto atrajo a más de 3.000 miembros, mientras que la pandemia del coronavirus agigantó todavía más la popularidad del programa. Inclusive, otros estados han copiado esta idea y la han implementado.
A su vez, desde su lanzamiento, el «Tulsa Remote» ha tenido un impacto económico destacado, ayudando a aumentar el PBI de la ciudad de Tulsa en nada menos que 60 millones de dólares, en tanto que el 90% de los participantes decidió quedarse.