Finalmente y luego de una larga espera, Netflix confirmó que Black Mirror está de vuelta. Este miércoles la plataforma estadounidense publicó un avance oficial de la sexta temporada de la serie que contará con la participación de grandes estrellas como Aaron Paul (Breaking Bad), Salma Hayek (Eternos), Kate Mara (House of Cards) y Zazie Beetz (Atlanta).
La última temporada se había estrenado en 2019 y su pausa indefinida comenzó en 2020, al desatarse la pandemia del COVID-19. Charlie Brooker, su creador, creía que no era el momento indicado para seguir agobiándonos con historias escalofriantes relacionadas a la tecnología. Ahora el tiempo de espera ha terminado y el público está listo para sumergirse en nuevos relatos de esta temática.
Según la sinopsis, este título “explora nuestro malestar colectivo frente a los avances de la modernidad, y cada entrega es un relato preciso y escalofriante de la tecnoparanoia contemporánea. Sin dudas, la tecnología transformó todos los aspectos de nuestras vidas: en cada hogar, cada oficina, cada palma de la mano, hay una pantalla, un monitor, un Smartphone. Por tanto, la serie es un espejo que nos devuelve una imagen ligeramente distorsionada – aunque sumamente verosímil- del siglo XXI”.
Originalmente, Black Mirror se emitía por la televisión británica a través de la señal de Channel 4. Sus dos primeras temporadas pasaron desapercibidas ante la mirada del mundo, pero fue en 2016 que su tercera temporada de sólo seis capítulos aterrizó en Netflix y se convirtió en todo un fenómeno global. La ficción fue desarrollada y escrita por Charlie Brooke, y este a su vez figura como productor ejecutivo junto a Annabel Jones.
El nuevo elenco está conformado por Aaron Paul, Anjana Vasan, Annie Murphy, Clara Rugaard, Josh Hartnett, Kate Mara, Myha’la Herrold, Paapa Essiedu, Rob Delaney, Salma Hayek Pinault, Samuel Blenkin y Zazie Beetz. Al ser una antología para la televisión, cada entrega está integrada por diferentes repartos de actores y cada uno de ellos protagoniza una historia en solitario que puede terminar muy mal o no del todo bien. Son muy pocos los finales felices, eso no es ninguna novedad.
