La semana pasada se conocieron los artistas que competirán el año que viene en la 67° edición de los Premios Grammy, el evento musical más emblemático de la historia. Aprovechando la terna, decidimos utilizar esta sección para recordar cuáles fueron los primeros autos que tuvieron algunas de las cantantes más nominadas.
Aunque su nombre pase desapercibido en parte de la Argentina, Charli XCX es una de las referentes del pop que más ha aportado al género en la última década. Luego de sacar grandes discos, este año finalmente logró un reconocimiento total con Brat, el álbum con el que sumó siete nominaciones. Además de hacer constantemente referencias a los vehículos en sus canciones, la británica posee una gran colección que puede resultar la envidia de muchos fierreros.
Según reportes, el primer coche que adquirió fue un Volkswagen Golf GTI, un clásico dentro de los modelos deportivos: «Lo elegí porque quería algo deportivo y divertido, pero también práctico para el uso diario. Es fiable, versátil y se adapta perfectamente a mis necesidades» , expresó en una entrevista.
Siguiendo con las mujeres, Billie Eilish también es fanática de comprar autos. A pesar de su corta edad, pues recién tiene 22 años, ha sabido utilizar su fama y talento para capitalizarlo tan increíblemente al punto de que se convirtió en una exponente del arte internacional.
Debutando en el volante, la joven se hizo en 2019 con un Mazda 5 de color azul fabricado en 2008, cuyo preció ronda entre los 19 mil dólares, ideal para alguien que está empezando saber lo que significa ganar una buena cantidad de dinero. A pesar del sentido que tiene en su vida, la creadora de «Bad Guy» solo publicó una imagen en su momento y la acompañó con la frase «¿Crees que me importa un carajo el Mazda 5? No señor, solo necesitaba una foto» .
Por otro lado, Taylor Swift es otra de las referentes que suele escribir temas detallando diferentes situaciones que suceden dentro de un vehículo. Con un buena cantidad de modelos en su cochera, la oriunda de Pensilvania recibió su primer auto en 2007 luego de cumplir 18 años.
Para enaltecerle la imagen de chica sensación, el sello discográfico Big Machine Records le obsequió un Chevrolet Silverado rosa con un motor V8 de 5.3 litros. Luego de usarlo durante un año, la ganadora de 14 Grammys decidió donarlo a la organización benéfica Victory Junction Gang para niños enfermos.