Un nuevo boom comenzó a ganar adeptos entre los fanáticos del arte en la Ciudad de Buenos Aires. Las llamas muestras inmersivas, proponen que el espectador pueda de alguna manera adentrarse en la obra de arte que observa. Las salas con pantallas como paredes y suelos y techos que proyectan partes de las obras proponen una experiencia diferente y de un alto impacto visual.
En ese contexto, llegó la hora de Leonardo da Vinci. La exposición “Da Vinci il Genio” invita a adentrarse en la obra y pensamiento renacentista a través de salas envolventes, hologramas, música, tecnología 3D, réplicas de obras y reconstrucciones de sus inventos se inaugura el 16 de junio en el complejo OH! (ex Buenos Aires Design).
Esta misma exposición, creada por el galardonado estudio de Florencia Art Media Studio, una institución italiana que diseña muestras y espectáculos multimedia, se inauguró por primera vez en Milán, con motivo de los 500 años de la muerte del autor de «La Gioconda» y desde entonces -con algunas ligeras variantes- viajó por Alemania, Suiza, Finlandia, Portugal, China, Corea y Nueva Zelanda, entre otros sitios del mundo.
La muestra se estructura a través de un recorrido dinámico y sensorial por varios espacios, que comienza con un holograma de Leonardo que le habla directamente al visitante, una galería de pinturas, con sus creaciones más conocidas, la sala inmersiva 360 que constituye el corazón del proyecto, una sala de espejos y de realidad virtual, además de una sala especial dedicada a «La última cena», donde una de las piezas más famosas de Da Vinci en tamaño monumental, y otra a los inventos.
La Mona Lisa y su misteriosa sonrisa amplificada en un tamaño monumental, el hombre de Vitruvio iluminado con neones de fondo, réplicas de la veintena de obras que este genial artista florentino realizó en vida y un holograma de Leonardo -interpretado por un actor- que le habla al público para contarle detalles de su pasado son algunas de las paradas visuales conforman el itinerario de «Da Vinci: Il Genio».
Si bien Leonardo (1452-1519) trascendió ampliamente por sus pinturas, su faceta de artista no fue más que una de las múltiples habilidades que demostró en vida: curioso y ávido observador, estudió de manera autodidacta ingeniería, arquitectura, ecología, música, óptica, botánica, urbanismo, física, biología, poesía, ciencia y, por sobre todo, la naturaleza.
La muestra que llegará a Buenos Aires buscará contar su historia en un lenguaje contemporáneo, incluyendo a Leonardo en persona, en forma de holograma, contando sobre su vida en las colinas de Vinci y su mudanza a Florencia donde se formó como pintor hasta la madurez artística que consiguió en Milán.