En el marco de los 125 años de amistad entre Japón y Argentina, la Fuerza Marítima de Autodefensa del Japón brindó un espectáculo de artes marciales y música en el Jardín Japonés. Decenas de familias y visitantes de todas las edades asistieron al clásico punto turístico ubicado en el barrio porteño de Palermo.
Las actividades se desarrollaron en el marco del arribo de los buques «Kashima» y «Hatakaze» este sábado, los cuales «desde su partida de Japón en mayo pasado, ya tocaron puertos en Estados Unidos, Canadá, México, Perú, Chile y ayer llegaron a Buenos Aires. Luego seguirán otros destinos y navegarán alrededor de 52.400 kilómetros durante 149 días en altamar», relató Hiroshi Yamauchi embajador del Japón en la Argentina durante la presentación.
La primera demostración de Judo fue realizada por dos miembros de este escuadrón, quienes mostraron varias técnicas de «derribe», mientras los presentes aplaudían cada caída, algunas calificadas como «bastante peligrosas» por los organizadores. Luego, llegó el turno del arte marcial Kendo, en el que otros dos marines se equiparon con un traje de samuráis y sables de bambú para realizar una demostración de lucha en la que realizaron estocadas a distintas partes del cuerpo, como la cabeza, la muñeca y la garganta.
Actualmente, se estima que en Argentina hay 65.000 descendientes de japoneses, remarcó durante su discurso el contraalmirante Konno Yasushige, comandante del Escuadrón. Entre ellos se encontraban los visitantes Héctor, descendiente de japoneses, en compañía de Kudo (85) que llegó al país hace 60 años. «Es muy lindo para la gente para ver otra cultura y hacer visitas a lo que es diferente. En este caso, después de tantos años volvió la Armada», manifestó Héctor sobre el regreso de la fuerza marítima, que desde hace ocho años no pasaba por Argentina.
El escuadrón también realizó shows musicales que incluyeron una demostración con tambores japoneses o «taiko», y luego la banda sinfónica tocó un repertorio que incluyó canciones como el tango «Caminito», pasando por el soundtrack de las películas «Una ciudad con vista al mar» y «Los increíbles», para finalizar con «Muchachos», en el que todos los visitantes aplaudieron animadamente.
El fanatismo por el anime es uno de los motivos que atrae a los visitantes más chicos, como el caso de Ciro (6) quien estaba vestido con una capa y un prendedor de la legión, obsequio de uno de los miembros del escuadrón. «Mi anime favorito es Naruto y Dragon Ball, que empecé a mirar a los cinco», contó a Télam el niño, que mira estas animaciones junto con su hermana Kiara (13) cuyo programa favorito es «Blue Lock».
«Lo pasamos espectacular, a los chicos les gustó mucho la demostración de artes marciales y la música», contó Iumi, descendiente de japoneses, quien visitó el jardín junto con su esposo y sus hijos Akia (6) y Mei (2).
