Estamos transitando la estación invernal en Argentina y habrá temporada de ballenas en nuestro país hasta diciembre. Como septiembre, octubre y noviembre son los meses en donde más ejemplares se juntan y se pueden avistar, en Chubut ya está empezando el espectáculo más importante.
En las últimas horas, la Península Valdés fue testigo de un hecho increíble: se registró una gran cantidad de ballenas en los golfos. Según informaron, numerosos grupos con crías y machos solitarios de la ballena Franca Austral aparecieron en simultáneo por la zona.
En una entrevista con la agencia de noticias Télam, el director científico del Instituto de Conservación de Ballenas (ICB), Mariano Sironi, comentó que esto se debe a que entre julio, agosto y septiembre «es el momento en que se producen la mayoría de los partos y por eso se ve por estos días tanta presencia de muchas madres con crías recién nacidas, otras con uno o dos meses y muchos grupos de cópula».
Y reveló: «Incluso el avistamiento de ballenas en la provincia de Buenos Aires, frente a Necochea, se explica por el mismo fenómeno de una población que crece y se expande en todo el litoral marítimo».
Desde el ICB informaron que entre el 31 de agosto y el 2 de septiembre de 2022 registraron 1420 ballenas en el «relevamiento anual de foto-identificación en Península Valdés» y que para julio de este año identificaron 1237 ejemplares, «206 más que el año pasado».
Chubut celebró 40 años de avistamiento
Desde el 15 hasta el 22 de junio, la provincia realizó la «Semana de las Ballenas», un evento para iniciar la «Temporada de Ballenas» y darle la bienvenida al animal más querido de la región.
Este año esa semana fue más que especial, ya que también se cumplieron 40 años desde que comenzó el avistamiento del mamífero como un producto para atraer a las personas.
Para celebrarlo, en Chubut decidieron desarrollar el «Visit Argentina Connect», un foro organizado por el Instituto Nacional de Promoción Turística y la Cámara Argentina de Turismo con el objetivo de compartir experiencias, estrategias y aportes de la promoción turística al exterior.
Si bien fueron 40 años desde que el avistamiento empezó a utilizarse como «un producto», en la Conservación de Ballenas siguen detalladamente a los mamíferos desde hace décadas. En enero se conoció que la más antigua es Rodocrosita, una hembra que lleva más de 50 años regresando a Península Valdés.
Según explicaron en su momento, el mamífero fue registrado por primera vez en 1971 en un álbum de fotoidentificación y desde entonces regresa cada año: «Es un orgullo y un hito importante. Nos tiene que despertar el amor por el ambiente y el mar, donde ocurren muchas historias, y poder ser más empático con el resto de los seres vivos», comentó una de las biólogas de Puerto Madryn, Camila Muñoz Moreda.