La Fundación INMULA es una organización sin fines de lucro que promueve la inclusión socio-laboral de grupos en situación de vulnerabilidad, creando las condiciones para una mayor igualdad de oportunidades y una participación en el ámbito profesional justa y equitativa. Nació para tender puentes entre las empresas y los componentes más vulnerables de la sociedad, orientando y sensibilizando al sector empresarial, brindando también apoyo para insertarse en el mundo laboral a quienes menos oportunidades reciben. Su presidente y fundador, Federico Spoturno Merchot, dialogó con ADN+ y nos contó cómo es que se organizan, y de qué manera vinculan a las partes con las cuales trabajan.
Federico cuenta con casi 30 años de experiencia en recursos humanos, con pasos por empresas del tamaño de Wal Mart, Nestlé, Clorox y Mercado Libre. En 2019, luego de conocer en primera persona cómo operaba el mundo privado en relación a las personas, y principalmente a aquellas con mayores dificultades para acceder a puestos laborales, decidió crear Fundación INMULA (acrónimo de Ingreso al Mundo Laboral). En aquel momento se abocó a tiempo completo a la organización. Hoy, retomó sus actividades en el mundo privado, donde complementa su labor social con su puesto de Gerente General de la Cámara de Puertos Privados. “Mucho ruido, pero poca inclusión real. Tanto del sector privado como desde el Estado”, afirmó, demostrando porque emprendió esta tarea. Luego, explicó cómo funciona INMULA: “La Fundación se basa en cuatro pilares que son Empleo joven, Empleo de personas con discapacidad, Empleo del colectivo LGTBIQ+ y empleo para mayores de 45 años”.
PRIMER PILAR: EMPLEO JOVEN
“El 70 % de los jóvenes se encuentran con empleo informales”, aseguró Federico. “Acceder a un primer trabajo se vuelve una tarea cada vez más difícil, además el tiempo para terminar los estudios se alarga y son más los jóvenes que los abandonan, con lo cual crece alarmantemente la población Ni-Ni», analizó. «Por eso estamos para ayudar creando un puente, que es el de la educación dual -que combina aprendizajes tanto en instituciones educativas como en empresas-«, explicó. Luego, comentó que también realizan cursos de capacitación, brindados por voluntarios en zonas vulnerables, con el fin de preparar a jóvenes para ingresar al mundo laboral. A su vez, apuntan a abrir espacios de concientización en empresas, dando charlas y creando programas que vinculen ambos grupos.
SEGUNDO PILAR: PERSONAS CON DISCAPACIDAD
Tanto personas con discapacidad motriz, como mental, son apoyados desde INMULA no sólo a conseguir empleo, sino también a que ese empleo sea de calidad, decente, y que las tareas adjudicadas sean dignas y valoradas. “Se necesita que salga la ley de cupo para el sector privado, sería muy importante”, mencionó Federico en relación a la posible salida de una normativa estatal al respecto. Si bien existen programas que otorgan beneficios por la contratación de personas con discapacidad, y el Estado cuenta con una ley de cupo del 4% del personal, la realidad dista mucho de ser lo que las regulaciones expresan. “Tenemos un gran trabajo por hacer en este punto”, agregó.
Cabe mencionar que legislaciones de este tipo están presentes en la mayoría de los países latinoamericanos. Uruguay, Brasil, Chile o Colombia la poseen, mientras que Argentina aún no. “Se rechazó hace relativamente poco, porque la normativa tenía algunos aspectos negativos y está bien que se haya rechazado, pero ahora con las correcciones necesarias debería ser sancionada”, dijo Federico.
Ver esta publicación en Instagram
TERCER PILAR: COLECTIVO LGTBIQ+
La Fundación INMULA no busca imponer a las empresas una determinada visión. “Sabemos con los valores que se identifica cada compañía, y en relación a ellos trabajamos”, comentó Spoturno, en relación a los distintos enfoques que llevan a cabo en cada intervención. De todos modos, detalló que “hay empresas que apuntan a públicos con distintos valores, pero que en la práctica se comportan igual”, por lo que remarcó que ellos “tienen que trabajar con eso”, y adaptarse “para sensibilizar desde el aspecto que más convenga dando pasos sólidos” En general, y en el caso de las personas LGTBQI+ en particular, desde la entidad apuntan a “visibilizar y rescatar la importancia de lo humano”. Aunque su presidente aclaró que también se trabaja el marco legal o normativo, “el foco está siempre en el talento y las personas”.
“Buscamos conmover y sensibilizar para generar inclusión por ese lado”, explicó Federico, que comentó la experiencia con la empresa Lacoste, en donde llevaron a cabo el ciclo de charlas “Protagonistas”. Allí, miembros del colectivo LGTBQI+ contaron sus vivencias personales, lo cual aseguró fue “realmente enriquecedor para los presentes. Muchas veces las empresas hacen lo que se denomina pinkwashing, pero nosotros tomamos la decisión de no acceder a esas prácticas”. El pinkwashing -lavado rosa- es un mecanismo que utilizan empresas, instituciones u organismos gubernamentales como estrategia de marketing para simular una inclusión con el mundo LGTBQI+ que no es tal.
CUARTO PILAR: EMPLEO ADULTOS MAYORES DE 45 AÑOS
Muchas veces los cambios tecnológicos, los problemas económicos del país, o las circunstancias de la vida dejan sin sustentos a adultos con una vida profesional consolidada, y encontrar un nuevo rumbo es una tarea más difícil de lo que parece. En ese grupo también está enfocada la fundación.
Un proyecto familiar
INMULA cuenta con un gran equipo, con especialistas en cada pilar, que trabajan de manera interdisciplinaria e intergeneracional. La cofundadora, Luciana Canese, licenciada en Trabajo Social, es la esposa de Federico, y uno de sus hijos trabaja en la Fundación, por lo que también es un proyecto familiar.
De cara a los próximos meses, INMULA está organizando dos eventos con miras a expandir sus horizontes y generar más vínculos para una mayor inserción equitativa en el mundo laboral. Uno, junto a UIA Joven, en octubre, para tratar la coyuntura actual de la industria y el mundo Pyme en relación a la problemática del empleo joven. Y otro, en el mes de diciembre, por el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, para fomentar su inclusión plena e igualitaria al mundo del trabajo.
