Buzz Lightyear, es uno de los protagonistas de “Toy Story”, la exitosa película producida por Pixar. El personaje que representa a un guardián del espacio, antes de volar siempre lanza una de sus frases más celebres: “Hasta el infinito y más allá”. Esto mismo, es lo que se propuso Candela Solis Zampini, que sueña con ser la primera astrobióloga argentina en trabajar para la NASA (Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio de los Estados Unidos). Para la joven, sus objetivos no tienen límites y también pretende llegar “hasta el infinito y más allá”.
Candela es una joven de 22 años y es oriunda de la localidad de Haedo (partido bonaerense de Morón). Cabe mencionar que desde temprana edad le interesaron las ciencias naturales, los documentales del espacio y también realizar experimentos. Luego, en el despertar de la adolescencia entendió que esta iba a ser su vocación y por lo que iba a luchar toda su vida para concretar sus sueños.
Al cumplir 13 años, Candela les propuso a sus padres que la cambien de colegio, a uno que sea especializado en ciencias exactas. De este modo, reafirmó su pasión por la experimentación y la observación. Sin lugar a dudas, la joven tenía bien claro a lo que apuntaba, ya que pocos años después, se encuentra a punto de transformarse en la primera astrobióloga argentina en trabajar para la NASA y así, poder sentar un precedente.
¿Qué dijo la joven acerca de este tema?
Candela Solis Zampini dialogó con La Nación y manifestó: “Desde chica me gustó la ciencia y la biología. Me acuerdo que me regalaron para Navidad un microscopio y no llegué a leer las instrucciones que ya me imaginaba que experimentos eran los que iba a empezar a hacer”. Con el pasar de los años, egresó del colegio secundario y luego, realizó el CBC (Ciclo Básico Común) en la Universidad de Medicina de Buenos Aires.
Aunque no todo fue color de rosas para Candela, ya que la pandemia de Covid-19 le puso un freno. Debido a que tanto el asilamiento obligatorio como la cursada de forma remota le complicaron sus planes para estudiar lo que tanto le apasionaba. Sin embargo, sus padres le brindaron una chance única y le ofrecieron mudarse junto con ellos a Estados Unidos para poder formarse allí (en uno de los países pilares en ciencias espaciales) y de esa forma, cumplir sus metas.
En relación a esta oportunidad, la joven expresó: “Estaba en cero, literalmente, cuando me plantearon ir con ellos. En cuestión de meses tuve que conseguir un montón de documentación para presentar en la universidad y a la par, prepararme para los exámenes que me iban a tomar para evaluar mis capacidades”.
La joven se decidió por la carrera de Astrobiología y el único que lo dicta es el Florida Institute of Technology (FIT). Desde enero del 2021 y con 19 años, Candela se estableció en la residencia de la universidad. Según la joven seleccionó esa casa de estudios, debido a que “reúne lo mejor de dos mundos: el espacio y la biología”. De acuerdo a lo que indicó Solis Zampini, la Astrobiología es una ciencia que estudia la biología espacial. Además, añadió: “Estudiamos todos los elementos que pueden alterar el espacio y probamos cómo se puede adaptar a lo que hay en el planeta para facilitar futuros viajes espaciales”.
¿Cómo hizo la NASA para fijarse en ella?
Con respecto a esto, la joven señaló: “Gracias a un profesor que siempre nos incentivaba a anotarnos en actividades extracurriculares, me postulé y me aceptaron en el campamento estudiantil de la NASA que ofrecía en el Centro Espacial Houston”. A su vez, comentó que fue una experiencia sumamente enriquecedora.
Con el tiempo y luego de insistir en varias pasantías relacionadas con la profesión, Candela reveló que volvieron a contactarla. “Sin pensarlo demasiado y arriesgándome a que me dijeran que no me candidateé en varias pasantías y programas para jóvenes profesionales hasta que me contactaron de Space Trek (empresa ubicada en el Centro Espacial Kennedy de la NASA, la cual, propone la exploración y divulgación espacial) para formar parte de sus proyectos educativos”.
Dentro del programa, Candela es parte de un equipo de trabajo que se encarga de diseñar los campamentos en los que asisten niños y adolescentes de cada rincón del planeta para aprender robótica, programación e investigación orientada al mundo exterior. Días atrás, este grupo dirigió programas de 400 chicos que habían concurrido al predio. Cabe destacar que Candela es la única argentina y latina que trabaja allí.
Candela habló sobre la Argentina
La joven que sueña con ser la “primera astronauta argentina” indicó: “Me encantaría que Argentina entre y compita en estos programas porque sé que el talento y la capacidad está”. Tras ello, agregó: “Es una lástima que allá no haya algo de esta magnitud y que no se destinen fondos ni se divulgue sobre la ciencia espacial”.
Cabe destacar que Candela se encuentra a poco de convertirse en la única argentina graduada en Astrobiología y la primera integrante de la familia en concretar estudios terciarios y apuesta a que es nuestro país se puedan llevar adelante proyectos como los de la NASA: “Tenemos todo para ser potencia aeroespacial, solo nos falta que alguien convierta las ideas en realidad”.
