Los patrones estéticos son modelos socio culturales que van mutando con el paso del tiempo, así podemos ver la diferencia de lo que se consideraba bello en diferentes períodos de la historia. Por ejemplo, veríamos que lo bello en el período barroco no lo era en el renacimiento. Es así que si le pidiéramos a la gente que enumere cuáles son los factores estéticos más importantes, o bien defina cuáles son aquellos que se acercan más a los que ellos tienen de la belleza, seguramente mencionarían la “perfección” de la silueta, la juventud, o la no existencia de arrugas o celulitis.
El considerar patrones estéticos uniformes para todo el mundo y pretender llegar a ellos de cualquier manera y a cualquier costo nos pone en una delgada línea de peligro tendiente a hacernos padecer una alteración en la percepción de la propia imagen, lo que a su vez expone a sufrir trastornos alimentarios como la bulimia y la anorexia, entre otros. La imagen corporal es la figura que tenemos de nuestro propio cuerpo en nuestra mente, por lo tanto si logramos tener un equilibrio entre cuerpo y mente, estaremos en armonía espiritual y tendremos en claro cuál es la verdadera belleza, aceptándonos como somos, valorando y potenciando nuestros puntos fuertes y evitando las comparaciones.
No existe un modelo único y prototípico de belleza, existen múltiples formas de ella en las que debe existir un balance entre el interior y el exterior para reflejar lo mejor de cada uno. ¿Y qué es lo mejor de cada uno? Creo definitivamente que es nuestro ser interior, es esa belleza y fuerza que existe en cada ser humano. Todos tenemos un sol interior, ese que nos da energía y vitalidad, ese que no debemos apagar, ese sol que dicen que marca el reflejo del alma a través de nuestros ojos. La verdadera belleza va de la mano con el alma, con la esencia de las personas y sus acciones.
Cuando me llegó la propuesta de ser jurado del concurso de belleza real, organizado por las Tinturas 317, lo primero que hicieron es aclararme que se trataba de la belleza interior. Casi en forma inmediata acepté la propuesta ya que me emocionaba conocer historias de vida, de superación o simplemente hermosas historias que nacen del alma. Por fin un concurso que muestra la verdadera belleza….la belleza del alma.
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