“No podemos quedarnos indiferentes: seríamos cómplices de la destrucción de la belleza que Dios quiso regalarnos en la creación que nos rodea”, escribió la máxima autoridad del Vaticano en el libro “El gusto de cambiar” de Carlo Petrini y Gael Giraud.
Además, Francisco llamó a no “cerrar las puertas” a las personas obligadas a migrar por el cambio climático. “Seamos realistas: el desarrollo económico imprudente al que nos hemos doblegado está provocando desequilibrios climáticos que pesan sobre los hombros de los más pobres, en particular en el África subsahariana», agregó en el prólogo.
En su escrito, el Papa destacó además a los movimientos juveniles contra el cambio climático y sostuvo que «no sólo nos lo piden, lo están haciendo: saliendo a la calle, manifestando su disconformidad con un sistema económico injusto con los pobres y enemigo del medio ambiente».
“El gusto de cambiar” fue escrito por el economista Gael Giraud y el agnóstico Petrini. Bergoglio ha trabajado con ellos en varios proyectos y en otros libros.